Para comenzar con tranquilidad, el primer fin de semana (30-31 de julio) estuvimos por Castelldefels, primero al aeropuerto a recoger a mi sobrino. Una buena madrugada, el avión llegaba a las 8:30h.
Una vez deshecha la maleta, comenzamos a dar una vuelta por Castelldefels, por la playa, pasando después a hacer las compras para comida y cena, luego, como no podía ser menos, a la playa a estrenar las vacaciones, aunque estaba nublado... lo que no impidió que llevara la sombrilla, para no chamuscarnos.
No nos chamuscamos y a cambio encontramos un nuevo uso, en primicia mundial, de una sombrilla parasol, el de paraguas.
En cuestión de un par de minutos, negros nubarrones se cernían sobre la playa (la foto es de mi sobrino):
Y si tardaron dos minutos en formarse, no tardaron ni medio en descargar. Espectacular comienzo de las vacaciones.
Nos metimos en un bar a tomar algo y salimos viendo que no escampaba. Utilizamos la sombrilla de paraguas, llegamos mojados pero menos (de mi casa en el pueblo a la playa hay un paseílllo).
Al día siguiente, decidimos sin agobios ir a Barcelona, lo que quiere decir que no madrugamos. Era fundamental comenzar la visita por Barcelona pasando por el Hard Rock café así que allá fuimos, pongo aquí una foto, el resto, en la web de mi sobrino:
Después de comprar un par de camisetas bajamos por las ramblas hasta la estatua de Colón, alguna que otra estatua viviente:
y nos dirigimos hacia el centro comercial Maremagnum, mucha ropa para mi gusto y poca chicha.
En la entrada al Maremagnum, buque de la armada |
Desde el Maremagnum |
A la salida |
Finalizamos como casi todos los días, en la playa, hacia las 18h, cuando va calentando menos el sol y la gente empieza ya a marcharse.
1 comentario:
jajajaja mu bien!
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