El jueves 21 de mayo finalizó (de momento) la serie de TVE Águila Roja. Veo poca televisión, generalmente algo de fútbol y solamente dos series, Aguila roja (TVE1) y House (Cuatro), porque películas ya no echan (nada que valga la pena o que no hayan repetido 20 veces).
Esta serie, de la que se han grabado 13 capítulos y aprovechando el tirón que ha tenido la van a estirar hasta que no dé para más, ha sido uno de los éxitos de la temporada, y pienso que justificadamente.
¿Una obra maestra? Por supuesto que no, pero es una interesante apuesta de TVE por patrocinar una serie divertida, de acción, un pequeño folletón en el siglo XVII con todos los ingredientes típicos para mantenerte sin pensar demasiado delante del televisor y no aburrirte, intrigas, traiciones, malos muy malos, buenos muy buenos, guapas muy guapas y hasta un paje bastante simpático (el criado del héroe).
TVE ha acertado y además creo que ha logrado acercar también una época a los telespectadores, en la serie se ha conseguido reflejar en parte (yo no estuve para verlo pero aquellos días cuentan los historiadores que no fueron fáciles) las miserias de aquella época, aunque en ocasiones, al guionista se le haya ido la mano (la muerte de un chiquillo con muletas para justificar después un chantaje o la muerte, absurda y con menos sentido, del barbero, me parecen muestras de violencia gratuita).
Los efectos especiales y la "coreografía" (no sé si ese es el nombre técnico) de las escenas de acción son bastante dignas.
Aunque resulta chocante la aparición de un ninja justiciero en el S.XVII, no debemos olvidar que en esa época ya hacía tiempo que había ninjas en Japón.
Respecto de los actores, los malos son buenos y los buenos son malos. La marquesa - especialmente - (Miryam Gallego) y el comisario (Francis Lorenzo) hacen un gran trabajo. De los buenos de la película se salva el paje, el resto debe mejorar...; los secundarios, especialmente la ama de llaves de la marquesa, son buenos actores.
Además, en la televisión a la carta se pueden seguir todos los capítulos, el último lo vi en Internet; otro gran acierto, sacar toda la utilidad posible a las tecnologías existentes, en vez de combatirlas, como otros parecen empeñados en hacer.
En definitiva, que me ha gustado, aunque imagino que si se alarga demasiado dejaré de verla.
Esta serie, de la que se han grabado 13 capítulos y aprovechando el tirón que ha tenido la van a estirar hasta que no dé para más, ha sido uno de los éxitos de la temporada, y pienso que justificadamente.
¿Una obra maestra? Por supuesto que no, pero es una interesante apuesta de TVE por patrocinar una serie divertida, de acción, un pequeño folletón en el siglo XVII con todos los ingredientes típicos para mantenerte sin pensar demasiado delante del televisor y no aburrirte, intrigas, traiciones, malos muy malos, buenos muy buenos, guapas muy guapas y hasta un paje bastante simpático (el criado del héroe).
TVE ha acertado y además creo que ha logrado acercar también una época a los telespectadores, en la serie se ha conseguido reflejar en parte (yo no estuve para verlo pero aquellos días cuentan los historiadores que no fueron fáciles) las miserias de aquella época, aunque en ocasiones, al guionista se le haya ido la mano (la muerte de un chiquillo con muletas para justificar después un chantaje o la muerte, absurda y con menos sentido, del barbero, me parecen muestras de violencia gratuita).
Los efectos especiales y la "coreografía" (no sé si ese es el nombre técnico) de las escenas de acción son bastante dignas.
Aunque resulta chocante la aparición de un ninja justiciero en el S.XVII, no debemos olvidar que en esa época ya hacía tiempo que había ninjas en Japón.
Respecto de los actores, los malos son buenos y los buenos son malos. La marquesa - especialmente - (Miryam Gallego) y el comisario (Francis Lorenzo) hacen un gran trabajo. De los buenos de la película se salva el paje, el resto debe mejorar...; los secundarios, especialmente la ama de llaves de la marquesa, son buenos actores.
Además, en la televisión a la carta se pueden seguir todos los capítulos, el último lo vi en Internet; otro gran acierto, sacar toda la utilidad posible a las tecnologías existentes, en vez de combatirlas, como otros parecen empeñados en hacer.
En definitiva, que me ha gustado, aunque imagino que si se alarga demasiado dejaré de verla.