DE LIBROS Y DE CRISIS

También en Valencia, entre falla y falla, me pasé por un centro comercial muy conocido a echar un vistazo a las novedades editoriales.

No debería haberlo hecho, con el mono que llevaba, después de un mes y medio sin comprar un libro. Esto puede en general sonar raro pero seguro que no tanto si se tiene en cuenta que en los últimos ocho años he comprado una media de 8 libros al mes.

Así que pasó lo que tenía que pasar, entré, vi un montón de libros interesantes y compré tres:

- Faceboom, un libro que cuenta de forma desenfadada de qué va el facebook, a ver si me entero de una vez de cómo funciona el tema este al que todo el mundo está (estamos) enganchado.

- Tercer Reich, de Roberto Bolaño, obra póstuma de un autor que algunos dicen que ha sido sobrevalorado.

- Todo va a cambiar, de Enrique Dans, que ya he empezado a leer, que sabía que me iba a gustar y que no me está defraudando. Sigo habitualmente el blog de Enrique Dans, en estos momentos uno de los más influyentes del país.

¿Por qué llevo un mes sin comprar libros? porque la crisis afecta a todo el mundo y hay que recortar gastos, esa partida se ha visto necesariamente afectada, buscaremos soluciones imaginativas para seguir aumentando a buen ritmo mi biblioteca particular.

Y UNAS POCAS FALLAS

Así es, el sábado dio bastante de sí, con la excusa de llevar el coche a mantenimiento y meter en el bolsillo una pequeña cámara compacta, sin grandes pretensiones.

No esperaba ver muchas fallas por Valencia pero una vez en el centro me acerqué por la calle del matemático Marzal y saqué alguna foto (de la falla de Convento de Jerusalén), muy buen ambiente en Valencia, muchos extranjeros y turistas en general.

Poco después de dar una vuelta por el centro viendo alguna que otra falla, me acerqué a las 13h a la Plaza del Ayuntamiento, la primera vez que asisto a la Mascletá desde "dentro", eso sí a cambio de estar una hora esperando.

Impresionante, como siempre.

Al dar la vuelta saqué unas fotos a la falla que hay en la plaza del Obispo Amigó.



Así finalizó el día fallero, me parece que este año no estaré en la Cremá...

Edito (17/3/10): la falla de las dos primeras fotos es la que ha ganado el primer premio.

LLEGÓ LA HORA DE LA COMIDA

Este sábado también estuve en el Parque de Cabecera, después de ver el estado del Turia (ver entrada anterior) me acerqué para hacer tiempo al Parque de Cabecera, serían aproximadamente las 9:30 de la mañana.

Al acercarme, observé que una multitud de patos y cisnes se me acercaba (estaba solo, salvo algún corredor despistado). Imaginaba que al ver a alguien acercarse, "pensarían" que podría echarles algo de comer.

Lo sorprendente llegó después, cuando efectivamente, se acercó una persona con una bolsa (imagino que era algún técnico del parque) dispuesto a dar de comer a los patos. Y éstos, por supuesto, se pusieron a ello, en fila india:

Se ve mi sombra, pero no podía hacer nada con el sol que tenía a mi espalda... además la imagen es realmente curiosa. La razón de la fila india es que la persona que les daba de comer, hacía una hilera con comida encima de las piedras.

Los patos no tenían inconveniente en acercarse, con lo que pude obtener estas imágenes de un pato de cabeza colorada y bastante bien alimentado (lo lamento, pero no sé la especie):



En definitiva, sin quererlo, un interesante paseo, ah, una cosa más, ¿qué es lo que no pega en la siguiente foto?:

OTRA VEZ EL TURIA CON AGUA

Este fin de semana me acerqué a Valencia, aproveché para hacer el mantenimiento del coche y mientras me lo preparaban eché un vistazo al cauce del Turia a la altura de la A3, como hice hace algún tiempo, una de mis primeras entradas.

El río llevaba bastante agua (aunque me da la impresión que no tanta como en mi otra entrada), como se ve en el vídeo:



El ruido que se oye es del tráfico de la autovía.

Aquí un detalle, con uno de los "caminos" preparados para el acondicionamiento del cauce.

MIGUEL DELIBES FALLECE EN VALLADOLID

Teniendo un blog y siendo de Valladolid, no puedo dejar de comentar la noticia de la muerte de un paisano que ha sido uno de los mejores escritores en lengua castellana.

Ha fallecido Miguel Delibes. Descanse en paz.

El pasado viernes ponía la noticia y me iba rápidamente de viaje. Ahora (domingo, 14) voy a escribir algo más aunque ya se ha dicho todo, y lo ha dicho en especial Miguel Delibes en sus obras.

Lo primero que recuerdo de las obras de Delibes es que cuando era muy joven me mandaron en el instituto leer Las ratas, una de sus mejores obras. No fui capaz de leer lo que entonces me pareció un bodrio insufrible.

Al pasar los años (muchos), un día cayó en mis manos el mismo libro de tapa blanca un tanto endeble de la editorial Destino (que todavía está en Valladolid). Y comencé a leerlo. Un tremendo drama, una magnífica novela.

He leído tres obras más de Miguel Delibes "El prícipe destronado", "El camino" y "El hereje", y aunque no es mucho considerando todo lo que ha escrito, sí suficiente "para hacerse una idea".

El pasado sábado vi el reportaje grabado hace tiempo en Informe Semanal en el que se entrevistaba al escritor, vale la pena verlo (ver en TVE a la carta), hablaba como escribía.

Es un orgullo que Valladolid haya dado gente de esta categoría. Delibes escogió quedarse en su tierra (que también es mi tierra) yo llevo fuera más de once años y aunque recorrer mundo no está mal, a veces se echa un poco de menos...

AVATAR 3D

Después de dos intentos en los que las colas que había en el cine me quitaron las ganas de entrar, ayer fui a ver AVATAR 3D.

En primer lugar, para los más despistados, el 3 y la D significan que te cobran unos dos euros más (pagué 9 euros por ver la película) y te dan unas gafas para no ver borroso o doble, eso sí, no son las que me esperaba de papel, sino bastante más consistentes como se ve en la foto.


Aunque tengo que admitir que una vez me aparté por un movimiento reflejo (no recuerdo qué es lo que me iba a sacudir) fue sólo una vez, la película no está pensada para el 3D y en una pantalla grande de cine, el 2D es suficientemente espectacular. De hecho, antes de empezar la película presentan unos trailers de películas en 3D en las que realmente se ve este efecto, mucho más definido en películas concebidas para las tres dimensiones.

Vayamos con la película. La base que utiliza es la misma que se ha empleado en gran cantidad de películas: una materia prima muy valiosa en un planeta lejano (no recuerdo ahora el absurdo nombre que le han puesto al mineral) y un yacimiento que está justo debajo del poblado principal de los habitantes del planeta.

Hay que convencerles de que se marchen a otro sitio, como los indios de norteamérica en su época que estaban en reservas. De hecho, los habitantes de Pandora (que así se llama el mundo donde viven) gritan en la película como si fueran indios. Además en una de las escenas cargan como los indios, con flechas contra una versión moderna de los soldados de Custer y su Séptimo de Caballería.

Para convencerles de que se marchen, utilizan un clon del protagonista que se mete en una máquina, se duerme y puede controlar a su otro yo, creado por ingeniería genética a partir de su ADN y que tiene la forma de los indígenas, al más puro estilo matrix, (aunque en este caso es algo más real que en matrix, luego me explico).

Tanto el mineral de vital importancia, como la necesidad de usar máscaras por parte de los humanos y finalmente el ambiente del pueblo de Pandora "beben" de la atmósfera creada por Frank Herbert en Dune, un conjunto de novelas centradas en Arrakis, un planeta peculiar con su especia, mineral de gran importancia, planeta a su vez muy seco, que obligaba a llevar un tipo especial de máscaras (hace años que leí la historia).

En definitiva, el argumento no es demasiado original, los malos quieren el mineral a toda costa, hay un grupo de científicos que defienden a los indígenas y la preservación de su mundo; el protagonista, primero aliado del malo y después convertido a la causa justa del pueblo. Entre los científicos cabe destacar a Sigourney Weaver, la primera vez que vi a esta actriz fue en otra película de James Cameron, Alien, el octavo pasajero, una obra maestra del cine de ciencia ficción (y del cine en general).

Por otra parte, hay que admitir que los temas que trata la película siempre son actuales y tienen gran valor educativo, la amistad, la lealtad, la naturaleza, la ecología, la defensa de valores básicos, nunca está de más incidir sobre ellos, sobre todo al público más joven al que pienso va destinada la película.

Miré un par de veces el reloj, se me hizo un poco larga (cerca de 3 horas) y las escenas, aunque espectaculares, no alcanzan (quizás tampoco lo pretendan) la épica de, por ejemplo, El Señor de los Anillos. Claro que esta última no era norteamericana.

Como dije antes, la analogía con matrix es exagerada, aunque en este caso hay una variación, el clon que interactúa con los habitantes de Pandora no es un conjunto de bits, sino real, de carne y hueso, de forma que el cambio final es más verosímil, si se puede utilizar esta palabra.

Por lo demás, no hay complicaciones argumentales, es muy previsible. Por ejemplo, en un punto de la película se dice que hace mucho tiempo que nadie es capaz de montar a un bicho volador muy grande y fiero y ya sabes automáticamente que el protagonista, unas escenas más tarde, lo hará. Eso sí, resultan poco creíbles las islas flotantes en un mundo dominado por la gravedad.

La película es bastante floja porque no aporta nada nuevo, pero es espectacular y una vez más se nota el efecto del gigantesco lanzamiento publicitario. Me parece excesivo que, como leí en algún sitio que ahora no recuerdo, el director contratara a un lingüista para crear un nuevo idioma. Un nuevo idioma para una historia repetida hasta la saciedad.

Y acabo de leer que será una trilogía. Que me esperen sentados en el cine, aunque añado, para no ser tan negativo, que esta primera no ha estado mal para pasar el rato.

Edición (12/3/2010): un anónimo amigo me corrige, Alien el octavo pasajero, en efecto, es de Ridley Scott, por supuesto no deja de ser una obra maestra.